Hay que aprender a vivir con la ausencia.
En la teleserie “Amanda” de Mega vemos diariamente a Teresita Reyes en su rol de “Yolanda”, llorando a mares por la pena que arrastra hace años pues su hijo “Víctor” (Felipe Contreras) es fruto de una violación que sufrió en su juventud por parte de su patrón. En la vida real la vida esta actriz es muy distinta por suerte, pero de todas maneras arrastra un fuerte dolor en su corazón hace ya 15 meses.
Teresita quedó viuda del hombre con quien estuvo casada por 42 años, Jorge Giacaman, un golpe que coincidió con que se tuvo que sacar – por temas médicos – la banda gástrica que tenía hace 14 años, y la pena la hizo subir 10 kilos. “Pesaba 58 y ahora estoy en 68. Gracias a que aprendí a comer menos no subí 30 kilos. La pena me baja en la noche y mi ritual es baja, sacar un chocolatito, pegarme un llantito y ver una película. Creo que con el tiempo lo empezaré a manejar, porque estoy con psiquiatra, sicólogo y tomándome un ansiolítico”, sincera en conversación con LUN.
Y sobre su esposo añade, “cada vez lo echo más de menos, pero no con esa angustia y desesperación del primer tiempo. Ya no lloro como en los primeros meses. Pero me hace falta verlo, tocarlo, abrazarlo, tomarle la mano. Siento que mi Pelao está en otro lado, pero sé que tengo que aprender a vivir sin él”.