Scarlett Johansson desató la polémica este jueves tras demandar a Disney por haber estrenado su más reciente cinta, Black Widow, de manera simultanea, tanto en cines como en su plataforma digital. Según la actriz, esto violaría su contrato con la compañía.
La dos veces nominada al premio de la academia presentó la demanda al Tribunal Superior de Los Ángeles, y buscaría daños no revelados en compensación.
En ese sentido, la ex heroína de Marvel Studios acusa que perdió parte importante de sus ingresos, ya que su sueldo dependía en gran del rendimiento de la cinta en cines.
El documento presentado ante la justicia indica que “Disney intencionadamente indujo el incumplimiento de contrato de Marvel, sin justificación, con el objetivo de impedir que Johansson obtuviera los beneficios totales de su acuerdo con Marvel”.
“Disney ha disfrutado de los beneficios de tener una de las mejores actrices de Hollywood promocionando su servicio de suscripción de propiedad total sin costo adicional para Disney, y con el efecto previsto de sacar dinero del bolsillo de esa actriz”, añade la denuncia.
Black Widow fue estrenada a principios de julio, y hasta la fecha ha recaudado cerca de 320 millones de dólares a nivel mundial, tras un exitoso primer fin de semana.
Sin embargo, los números se desplomaron tras la segunda semana de presentación, al punto que producciones como Rápidos y Furiosos 9, prácticamente dobló la recaudación de la entrega de Marvel. Esto sin estar en ninguna plataforma de streaming.