A nadie le caben dudas de que la teleserie “Adrenalina” fue un verdadero éxito, especialmente dentro de los jóvenes de la época. Tanto fue el impacto, que hoy Canal 13 lo está retransmitiendo por sus pantallas.
Uno de sus personajes protagónicos fue “Andrés Betancourt” interpretado por Luciano Cruz-Coke, que ahora es diputado y que fue entrevistado en el podcast “Impacto en el Rostro”, sobre esta producción y la censura que tuvo.
“Pasaba un poquito por lo que ocurría en el colegio ‘Warrington’, donde estaban las chicas y claro, se ponían los vestidos más cortos, porque también era un poquito pavo andar con los jumper hasta la rodilla. Salían en escenas en ropa interior cambiándose, porque eran adolescentes. Se abordaba el tema de la droga“, comenzó narrando.
“Y eso en un canal cuyo propietario era la Iglesia Católica era fregado. Incluso costó algunas salidas de ejecutivos. A nosotros nos trataban de mantener un poco lejos de eso, pero uno se daba cuenta claramente. Yo creo que Pablo (Illanes, guionista de “Adrenalina”) igual se daba cuenta y todos comentábamos”, continuó.
“Y si uno lo mira ahora con la perspectiva del tiempo, la teleserie era bastante naif, entonces pasa un poquito por esas exageraciones culturales. En donde también los mismos equipos se autocensuran más por temor a que los de arriba les vayan a decir ‘oye, está pasando esto’. Pero sí hubo en su momento cartas al diario. Pero una censura totalmente absurda y además la teleserie fue un éxito y todo eso sirvió como efecto amplificador para el éxito que la teleserie tuvo“, reconoció el diputado Evópoli.
Una nueva “movida” en Chile
Cruz-Coke, que ahora tiene 51 años, mira hacia atrás y analiza el fenómeno: “Lo que sucedió con Adrenalina era lo que estaba sucediendo en las discoteques, en las niñas que estaban cambiando la forma de relacionarse con los padres. Había muchos niños que le hablaban con garabatos a los papás y medio que querían una suerte de independencia”.
Además agregó que: “Estábamos en una suerte de nuestra movida chilena, en donde se quería liberalizar, salir, cortar el vínculo que veníamos de la dictadura. Había una lógica de abrir, de romper, de salir al mundo y de ahí el título de Adrenalina. Salimos con ganas a tratar de romper los esquemas de lo que estábamos acostumbrados”.
También añadió que el impacto se debe a que la teleserie era cercana a la sociedad, con temas más reales: “Eran elencos más jóvenes y que estábamos dando cuenta de lo que estaba ocurriendo. Antes el mundo dramático se aislaba, contaba su historia, pero no era una historia donde la personas pagaran cuentas o vivieran en un mundo real chileno y acá había mucha imagen de las micros amarillas, de la calle, del colegio, de cosas que estaban pasando. Por primera vez se inserta la teleserie en un mundo que la gente podía reconocer con mayor facilidad. Funcionó y cambió la lógica”.
Mi personaje no era tan bueno
El diputado reconoció que el personaje de Andrés no era de su agrado: “Mi personaje no era tan bueno. Le tengo más cariño a ‘Benjamín Smith’ de Amor a Domicilio que a ‘Andrés Betancourt’. Era poco definido, porque andaba, después volvía con la Francisca (Merino), que era la ‘Cata’ (‘Cathy Winter’). La pobre Cata que hacía el papel cacho, porque andaba todo el día persiguiendo a este pelotudo”.
“Era bien vaca. No sabía si le gustaba la colegiala o le gustaba esta, después se mete con la ‘Alexis Opazo’ en la mitad. Yo conversaba con Pablo Illanes y le decía ‘¿por qué este gallo es tan zigzagueante?’. Pero parece que la lógica del personaje era así. Era bien posmodernillo”, cerró.