Fue el pasado sábado cuando el periodista de Mega reveló que su esposa e hijos habían sido testigos de un asalto en un centro comercial de Chicureo, situación que tocó nuevamente en el matinal “Mucho Gusto” durante la jornada de hoy.
“Yo vivo a pasos de ese centro comercial. Puedo ir caminando a 8 minutos. Estaba acostado, y ella se fue al súper con los cabros. Bueno, me meto a la cama, pongo algo para quedarme dormido. A los 15 minutos me suena en teléfono con un griterío y llanterío espantoso. El corazón me quedó acá. No había vivido ese susto“, inició comentando, junto a los conductores del espacio Karen Doggenweiler y José Antonio Neme.
Luego continuó: “La pobre no podía hablar, me dijo que fuera al centro. Hay una balacera. Yo le pregunto dónde está, me dice que está en el estacionamiento. Solo pedía que no se me cruzara nadie al pasar. Fui rajado. En dos o tres minutos me meto al subterráneo. Ver a tu mujer, tus niños llorando desconsolados“.
En la misma línea, aprovechó de agradecer los mensajes de apoyo que recibió en la oportunidad, aunque también criticó algunos de los mensajes que recibió: “Un momento de mierda. Aquí hay gente que escribe súper solidaria y súper cariñosa. Pero también hay gente bien imbécil. Te ponen unas cosas horribles, una teorías. Creen que hay conspiración. Yo quiero decir fuerte y claro: en esto nos tenemos que unir“.