Policías argentinos tuvieron que decomisar unos 6.000 kilos de marihuana que quedaron almacenados en el depósito judicial de la localidad de Pilar. Sin embargo, en el último recuento se notó la desaparición de 540 kg de marihuana.
Los policías a cargo negaron absolutamente su responsabilidad al respecto y aseguraron que las ratas podrían habersela comido.
La hipótesis de los policías, no convenció a la Justicia, ya que acaban de imputar a tres comisarios por infringir la Ley de estupefacientes. Actualmente, los policías están siendo investigados por asuntos internos, aunque aún no se han tomado medidas contra ellos. “A la espera de que presten declaración en la causa”, informaron a EL PAÍS desde el Ministerio de Seguridad.
Según los péritos judiciales, no se encontraron rastros de una invasión de roedores en el depósito en el que la droga llevaba guardada al rededor de dos años. “Si hubiera habido ratas habría evidencias contudentes: heces, orina, envoltorios rasgados, restos en el piso”, explicó una veterinaria. “La marihuana es tóxica para el animal, en esas cantidades estarían muertas”, agregó.
El próximo 4 de mayo están citados a declarar los imputados, quienes hasta ahora siguen en sus puestos.