El fiscal Alberto Nisman, quien investigó el atentado a la mutual judía AMIA de 1994 y acusó a la expresidenta Cristina Kirchner de encubrir a iraníes, vuelve este sábado al centro de la escena política argentina, cinco años después de su muerte sin esclarecer.
Nisman tenía 51 años el 18 de enero de 2015 cuando apareció muerto de un disparo en la cabeza en su apartamento del lujoso barrio de Puerto Madero en Buenos Aires.
Este sábado por la tarde se realizará en Buenos Aires un acto en memoria del fiscal, cuya convocatoria fue difundida por redes sociales, y a la que se sumaron dirigentes de la alianza opositora Cambiemos.
“Justicia perseguirás. No fue suicidio, fue magnicidio”, repite el documento que será leído en el acto, difundido en la víspera a través de Twitter por Patricia Bullrich, exministra de Seguridad y presidenta del Pro (derecha), el partido del exmandatario Mauricio Macri (2015-2019).
El escrito es de tono acusatorio contra Kirchner, ahora vicepresidenta, a quien opositores responsabilizan por la muerte del fiscal, e incluye fuertes críticas al actual mandatario, el peronista de centroizquierda Alberto Fernández.
Cuatro días antes de ser hallado muerto, Nisman había denunciado a la entonces mandataria Cristina Kirchner (2007-2015) por la firma en 2013 de un memorándum con Irán que nunca se aplicó. Según él, Kirchner pretendía encubrir a exaltos funcionarios iraníes a los que él había acusado de organizar el ataque a la AMIA, que causó 85 muertos y 300 heridos.
“Nadie que se crea dueño de una verdad se suicida, nadie que tenga semejante entusiasmo vital se quita la vida”, señala el documento para el homenaje al fiscal.
– La familia, en privado –
Héroe de la causa AMIA para unos, villano para otros que señalan sus cuentas en el exterior y propiedades no declaradas, la figura del fiscal es un símbolo de la grieta que divide a los argentinos.
Este año, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) y la familia de Nisman optaron por una ceremonia privada el domingo en el cementerio judío de La Tablada.
“Hay que separar la política del recuerdo de Nisman”, declaró el presidente de la DAIA, Jorge Knoblovits.
El mandatario argentino participará el próximo jueves en Israel en la conmemoración de los 75 años de la liberación del campo de concentración de Auschwitz. Será su primer viaje al exterior desde que asumió el 10 de diciembre.
– Geopolítica –
Kirchner y su canciller Héctor Timerman, fallecido en 2019, insistieron en que intentaban desempantanar la causa AMIA, que llevaba más de 20 años sin avances. Este “entusiasmo” les “hizo olvidar intereses geopolíticos en pugna”, afirma la expresidenta en su libro “Sinceramente”, publicado el año pasado.
Las potencias mundiales se encontraban en plena negociación por el pacto nuclear con Irán, rechazado por Israel, y que firmarían a mediados de 2015 Francia, Alemania, Reino Unido, China, Rusia y Estados Unidos, país que se retiró en 2018 con Donald Trump en la presidencia.
En noviembre, el gobierno de Macri incluyó al movimiento chiíta Hezbolá en una lista de “grupos terroristas”. Uno de sus integrantes fue señalado por Nisman como autor material del atentado.
– “Agujero negro” –
“La causa AMIA es un agujero negro. Nadie sabe a ciencia cierta qué es lo que hay”, se lamenta Diana Wassner, cuyo marido murió en el ataque y fue muy crítica de la tarea de Nisman.
Unas 2.000 cajas con documentos, 5.000 escuchas en casetes y videos en VHS, parte de los archivos de la causa AMIA desclasificados por Kirchner en 2015, fueron encontrados esta semana rodeados de escombros y vidrios rotos en un inmueble en estado de abandono de la Agencia de Inteligencia, que acaba de ser intervenida por Fernández.
En 2019, 25 años después del atentado, un juez, dos fiscales y un exjefe de inteligencia, entre otros, fueron condenados por desviar la investigación inicial.
La denuncia de Nisman contra Kirchner fue desechada en varias instancias judiciales hasta que en 2016 fue reabierta por el juez Claudio Bonadío, quien concentra una decena de causas contra la vicepresidenta. Ahora, espera fecha para el juicio oral.
La causa por la muerte de Nisman sigue en instrucción. Tras pasar en 2016 al fuero federal, la justicia consideró probado que fue víctima de un homicidio como “directa consecuencia de la denuncia” contra Kirchner.
El dictamen se basa en una cuestionada pericia de Gendarmería -tildada de “absurda” por el presidente Fernández- que contradice otro estudio criminalístico policial y la autopsia del cuerpo médico forense.
Están procesados cuatro custodios de Nisman y su asesor informático Diego Lagomarsino, dueño de la pistola que acabó con la vida del fiscal. En su defensa, Lagomarsino sostiene que Nisman le pidió prestada el arma porque temía por sus hijas.