El presidente estadounidense, Donald Trump, confirmó este jueves los planes para realizar en junio en la Casa Blanca una cumbre presencial de líderes del G7, a pesar de las limitaciones impuestas por la pandemia del coronavirus.
“Parece que el G7 tendrá lugar”, dijo Trump en Washington, en referencia a un encuentro de líderes del grupo.
El mandatario agregó que la cumbre se desarrollará “principalmente” en la Casa Blanca, aunque algunas reuniones podrían hacerse en la residencia presidencial de Camp David, en el vecino estado de Maryland.
Trump había asomado por primera vez la idea de hacer la cumbre presencial el miércoles, llamando a sus pares de Alemania, Canadá, Francia, Italia, Japón y Reino Unido a viajar a Estados Unidos para el evento.
A mediados de marzo, debido a la pandemia, la Casa Blanca había renunciado a celebrar esa cumbre en presencia de los jefes de Estado del G7, y se había mostrado a favor de realizarla por videoconferencia.
El Ejecutivo estadounidense ahora presenta la cita diplomática entre las potencias como una “muestra de fuerza” en momentos en que las economías del mundo lentamente resurgen tras la paralización causada por el coronavirus.
AFP.