La Comisión de Fiscales de Anticorrupción de Bolivia realizó una acusación formal en contra del ex presidente Evo Morales y ordenó su detención. Se le imputan cargos por delito de Terrorismo y Financiamiento al Terrorismo.
Morales es acusado de instruir a un dirigente cocalero para bloquear caminos e intervenir el suministro de alimentos de distintas ciudades. Esto, ante el descontento social que produjo disturbios a raíz de las polémicas y fraudalentas elecciones vividas en Bolivia.
La investigación tomó curso el pasado 20 de noviembre, después de que el ministro de Gobierno interino Arturo Murillo, diera a conocer la información.
Para ese entonces, el mandato de Jeanine Áñez, presentó cargos de “sedición, terrorismo y financiamiento del terrorismo”. A razón de las causas, dos fiscales solicitaron la captura de Morales y que fuera presentado a comparecer ante las autoridades. En esa fecha, Morales se encontraba en Argentina bajo el “estatus de refugiado” y las autoridades se negaron a su extradición.
Las pruebas que lo inculpan
En un audio que inculpa a Morales, se oye instando al cocalero Faustino Yucra a dar “dura batalla a los fascistas y racistas”.
“Va a ser hora de combate, combate, combate (…) Con el pueblo alteño y otros sectores, vamos a derrotarlos”. Solicita también que hagan “cercos de verdad” de manera que “no entre comida a las ciudades”. El ex mandatario pide además que dosifique el trabajo y de descanso “cada 24 horas” . “Hay bloqueo hasta ganar, hermano”, indicaba Evo Morales.
Al momento de intercambiar los audios, Morales se encontraba en México. Hasta allá llegó en calidad de exiliado luego de su renuncia a la presidencia, esto antes de emprender viaje hacia Argentina.