El presidente de Brasil Jair Bolsonaro será formalmente investigado por la fiscalía del país. Esto para determinar si hubo irregularidades tras acusar de “fraudulento” al sistema de voto electrónico durante un programa en vivo.
En ese sentido, el mandatario intentó instaurar duda en la población al levantar sospechas en contra de este tipo de urnas, que se encuentran vigentes en Brasil desde 1996.
Sus dichos se dieron a fines de julio, a través de los pronunciamientos semanales que en directo mediante las redes sociales. Tras esto una gran cantidad de diputados de la oposición acusaron al presidente de improbidad administrativa.
Según ellos, Bolsonaro hizo propaganda electoral anticipada en su transmisión en vivo del 21 de julio. Además acusan al mandatario de haber cometido abuso de poder económico y de autoridad.
Al respecto el Fiscal Regional de Brasil, Augusto Aras, indicó a los diputados que su petición deberá ser archivada, ya que existen investigaciones abiertas relacionadas a las causas que acusan.
Bolsonaro se ha pronunciado durante semanas en contra del sistema electoral, los que llevó a la Corte Suprema y al Tribunal Electoral a iniciar varias investigaciones en su contra.