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Un ex asesor medio ambiental de la planta realizó la denuncia, luego de que fuera despedido por acoso laboral.

La planta ubicada en la comuna de Hualpén decidió realizar una investigación interna por presunta corrupción, luego de que Marcelo Canales, ex asesor medio ambiental, fuera despedido por acoso laboral y decidiera denunciar las anomalías.

Canales plantea que ENAP Biobío habría defraudado por más 800 millones de pesos en sobrepagos y dineros extras que iban destinados a campañas políticas. Estas irregularidades en licitaciones de contratos habrían comenzado desde el 2014 hasta abril de este año.

La denuncia formal será presentada a la Contraloría General de la República el martes 7 de noviembre. Por otro lado, ENAP a través de un comunicado señaló que todos los documentos serán puestos a disposición para que sean investigados.

ACTUALIZACIÓN:

ENAP lanzó un comunicado señalando:

1.- En relación con la nota que circula en los distintos medios y redes sociales, desmentimos categóricamente que exista alguna denuncia formal en instancias administrativas internas relacionada con una supuesta corrupción por sobrepago de contratos públicos.

2.- Producto de las alegaciones de este trabajador, la empresa -en línea con la política de velar por la transparencia de todas las contrataciones-, inició una auditoría forense respecto del alcance de ese contrato, lo que aún está en curso y con cuyo resultado la empresa iniciará los canales de acción que correspondan.

3.- Marcelo Canales, ex trabajador de ENAP Refinería Bío Bío, hizo la denuncia de este caso en el contexto de su desvinculación en abril de este año, y no antes, respecto de hechos que se referían al año 2014. Esta desvinculación se dio, además, tras comprobarse de manera fehaciente el acoso sexual contra una estudiante en práctica que trabajaba en su área.

4.- Nos extraña,  además,  que dicho medio haga mención a una cifra  que no ha sido corroborada con la empresa y sin entregar los detalles específicos asociados a este hecho, tratándose de una materia tan delicada como es el patrimonio de la compañía.

5.- Asimismo, rechazamos la interpretación  antojadiza del medio, que vincula un contrato específico ya individualizado con eventuales pagos a campañas políticas. Esto último es inaceptable tratándose ENAP de una empresa pública, clave en el desarrollo energético de Chile.

6.- Dado lo anterior, nos reservamos el derecho a ejercer todas las acciones que correspondan y a defendernos en las instancias que definamos contra todos aquellos que intentan enlodar la reputación de una compañía que es patrimonio de todos los chilenos.

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