La Corte de Apelaciones de Santiago ordenó a los padres de un adolescente que inicie una terapia psicológica con el propósito que la menor no siga maltratando y amenazando a compañeros de su curso.
En fallo unánime, los jueces acogieron un recurso de protección con carácter cautelar presentado por los padres de otro joven que fue amenazado por la muchacha, acusada de maltrato a sus compañeros.
Según el fallo, los magistrados advierten que “si bien el colegio ha adoptado diversas medidas para abordar el problema, aquellas resultan insuficientes si los padres de la adolescente involucrada no asumen, al menos, la realidad de los hechos constatados por el establecimiento estudiantil previa conversación con los alumnos, el reconocimiento que hace la propia niña de “encarar” a su compañero en un funeral” plantea el texto.
También la sentencia asegura que “los dichos de otra alumna también dan cuenta del temor de D.B.L.R frente a C.E.C.S, demostrándose así una negación de la realidad que si bien puede entenderse como un apoyo irrestricto a su hija, no ayuda en la solución del problema”, sostiene el fallo.
La resolución asegura que “el Código Civil hace responsable al padre, y a falta de éste a la madre, por los hechos de los hijos menores que viven en la misma casa. De igual forma responsabiliza a los jefes de colegio y escuelas por los hechos de sus discípulos, mientras están bajo su cuidado. Conforme a ello, al menos, el establecimiento estudiantil ha intentado abordar el problema mediante sus programas de convivencia escolar, advirtiéndose la necesidad que para su real eficacia, los padres recurridos den cumplimiento a la sugerencia efectuada por la psicóloga del colegio en orden al inicio de un tratamiento psicológico para la adolescente y sus padres destinado a encauzar debidamente el comportamiento de la niña con sus pares” aborda la decisión judicial.
Asimismo, los jueces apuntan que “la adquisición de herramientas de los progenitores para el logro de ese fin y trabajar en la autoestima de la menor debe ser el fin del conflicto. De igual modo se hace necesario que, desde ya, los padres responsables de la menor instruyan a su hija en el cese de la hostilidad a su compañero como forma de solución de los conflictos” detalla el fallo.
La decisión fue adoptada por la Cuarta Sala del tribunal de alzada capitalino, que estuvo para esta causa integrada por las ministras Mireya López, Adelita Ravanales y el abogado integrante Gonzalo Ruz.