La Superintendencia de Educación reveló que 745 estudiantes han sido expulsados de sus establecimientos durante el último año.
Cifra que se da a conocer en medio de la polémica tramitación que se desarrolla en el Congreso del proyecto de Convivencia Escolar, antes conocido como Aula Segura.
Según publicó La Tercera, de esta cifra, el 49 por ciento de estos ocurrió por agresiones de estudiantes a sus compañeros, mientras que solamente un 14 por ciento corresponde a violencia contra docentes o asistentes de la educación.
Mientras tanto, un 37 por ciento fue por motivos de gravedad, como el consumo o tráfico de drogas o el porte de armas.
En promedio seis alumnos salen de las aulas por semana, entre expulsiones inmediatas y cancelaciones de matrículas, producidas al término del año escolar.