El Fiscal Nacional, Jorge Abbott, visitó las dependencias del Ministerio Público en Rancagua para reunirse con funcionarios locales y aquellos de la sede regional de O’Higgins, a fin de brindarles “apoyo” y “tranquilidad” en medio de las investigaciones a Emiliano Arias, tras las denuncias de su subordinado Sergio Moya.
Abbott apuntó que su intención fue conversar con los trabajadores, previendo que existe una “situación que tiene preocupadas a las personas” y señaló que habló con todos los funcionarios, menos con Emiliano Arias quien se encontraba de permiso administrativo.
“Mi obligación como jefe superior del servicio es venir y darles tranquilidad. Los problemas que se están enfrentando en esta fiscalía regional tienen que derivarse por los caminos que establece la ley”, afirmó.
La autoridad aclaró que como trabajadores del “mundo de los conflictos penales” se está acostumbrado a este tipo de indagatorias. “Claro, no estamos acostumbrados a que ocurra con nuestros funcionarios, pero no estamos exentos”, aseveró.
“Cuando ocurren situaciones al interior de nuestra institución tenemos que tener la capacidad de hacernos casos de las mismas”, explicó al tiempo que pidió tener la “certeza de que elegimos las mejores personas para hacerse cargo” de las investigaciones.