Tras la reunión del Comité Directivo de Essal, que evaluó el nuevo escenario que enfrenta Osorno al decretarse la cuarentena total y cordones sanitarios para la ciudad, la compañía determinó reforzar aún más el plan operativo de emergencia con el objetivo de asegurar la continuidad del suministro de agua potable.
El gerente general de Essal, José Sáez, manifestó que “la compañía ha tomado todas las medidas posibles para asegurar a cada uno de sus clientes el servicio. Sabemos que el agua potable es esencial para el combate del coronavirus y por eso trabajamos día a día evaluando cada escenario para brindar un servicio de calidad en medio de la contingencia que enfrentamos todos”.
Agregó que tras la reunión de hoy del equipo directivo de la sanitaria se determinó, entre otras medidas, potenciar aún más los equipos técnicos de respaldo para la operación directa y presencial, en caso de detectarse contagios.
A estas medidas se suman las ya adoptadas por la compañía, partiendo por disponer de los insumos necesarios y suficientes para mantener la operatividad habitual, como pueden ser flúor o cloro.
Essal también reforzó los sistemas e infraestructura tecnológica que permiten desarrollar los diferentes procesos para optimizar el teletrabajo e implementó una vigilancia permanente de las condiciones de salud del personal crítico (operadores y centro de control).
Además, la compañía conformó equipos independientes de trabajo operacional en las diversas plantas de tratamiento de agua potable, dado que las características de la actividad requieren una labor presencial que imposibilita el teletrabajo.
“Los equipos funcionan de forma independiente para evitar cualquier riesgo de contagio y, en caso de que se detectase en alguno de ellos, se podrá establecer de inmediato el periodo de cuarentena. Lo importante es ser proactivos para proteger la salud de las trabajadoras y trabajadores y por supuesto de todos los osorninos.”, explicó Sáez.
La compañía también implementó un sistema de despliegue de personal crítico por proceso, que se realiza en turnos y traslados separados para evitar el contacto. A esto se suma la intensiva sanitización de las instalaciones y vehículos al final de cada jornada y traslado.
En el mismo ámbito, Essal dispuso medidas especiales para el personal contratista, como la suspensión de toda actividad en la vía pública, entre las que se incluyen la entrega de boletas y toma de lectura en medidores.
CL/Aton Chile