La Compañía General de Electricidad (CGE) informó que en el primer semestre del año se han efectuado 671 eventos de robo de cable, lo que equivale a casi 100 kilómetros de líneas robadas.
Según informó la compañía, estos robos tuvieron como consecuencia que más de 110 mil clientes “vieran afectada la calidad y continuidad de su suministro eléctrico durante largas horas, producto de los extensos trabajos que deben realizar las brigadas de la compañía para reponer la infraestructura dañada o destruida por delincuentes”, exponen en un comunicado.
Recordar que la empresa entrega su servicio a más de 3,2 millones de personas entre las regiones de Arica y Parinacota y La Araucanía.
“El robo de cables eléctricos ha tenido un aumento exponencial en los últimos años y es necesario que las autoridades tomen cartas en el asunto. Nosotros como compañía realizamos las denuncias respectivas, pero es necesario perseguir y desarticular a estas bandas, ya que su accionar afecta directamente a miles de familias a lo largo del país”, dijo Matías Hepp, director de Operaciones de CGE.
Sobre el costo de reposición de infraestructura dañada o destruida, este alcanzó los 2.295 millones de pesos en el primer semestre del 2023.
En tanto, los lugares que registran un mayor número de estos incidentes en el primer trimestre del año son la regiones de Coquimbo, O’Higgins, Arica y Tarapacá, Atacama, Biobío, Antofagasta y Metropolitana.