El delegado presidencial de La Araucanía, José Montalva, abordó este lunes la situación de la región por los incendios forestales, enfatizando que durante la jornada del domingo enfrentaron al menos 10 focos, siendo los de las comunas de Lonquimay y Galvarino los más críticos.
En conversación con “La Mañana de Agricultura”, la autoridad regional detalló en Galvarino el “fuego avanzó muy rápido y empezó a llegar a la zona poblada”, situación que complicó a los equipos de emergencia y a los habitantes del lugar.
De hecho, para facilitar la evacuación de las personas se debió emitir una alerta SAE en la mencionada comuna, “dado que estaba complicado el riesgo de las viviendas”, dijo el delegado Montalva.
No obstante, “se pudo desviar, hacer una gran contención”, permitiendo dar tranquilidad a las personas, por lo que se levantó la alerta.
“La verdad que estamos con las 32 comunas con alerta amarilla por altas temperaturas y multifocos de incendios. En Lonquimay y Galvarino tenemos alerta roja, porque los incendios llevan varios días y han estado en riesgo viviendas. Hemos podido hacer frente a esos incendios”, sostuvo.
⚠️Se levanta alerta SAE de #evacuación para #Galvarino
— Delegación Presidencial Regional de La Araucanía (@DPRLaAraucania) February 5, 2024
👉🏻Se mantiene alerta roja comunal.
⭕️Solicitamos a toda la comunidad mantenerse #ALERTA e informados a través de los canales oficiales.@josemontalva @Senapred @galvarinochile @GobiernodeChile pic.twitter.com/uPvAipjDKK
Focos en Lonquimay y Galvarino
A lo anterior, Montalva reportó que durante la jornada del domingo “hubo 10 focos activos en la región, pero los complicados están en Lonquimay y Galvarino”.
“En Lonquimay por lo menos hay cuatro focos que están activos y que se van juntando algunas veces cuando van creciendo. Lo mismo pasó en Galvarino, inicialmente había cuatro focos, se logró contener tres focos y se mantenía uno muy complicado, que era Nilpe 4“, detalló.
Aquel siniestro que mencionó la autoridad fue el que en horas de la tarde del domingo “Se escapó de las manos, porque era muy difícil el viento, el combate”.
“En Galvarino también tiene vegetación forestal muy cerca de las casas. Sin embargo, el cortafuego que se hizo, que se pudo reforzar, fue lo que permitió en la noche estar tranquilo, porque no iba a llegar a las casas”, concluyó.