Tras el rechazo de las indicaciones presentadas por el Gobierno a la ley Nain-Retamal en la comisión de Seguridad del Senado, la ministra del Interior, Carolina Tohá, se retiró de la sesión, al igual que el ministro de Justicia, Luis Cordero.
Según el diputado del Partido Comunista (PC), Matías Ramírez, esto “refleja un poco el ánimo a evitar un debate que debe ser más profundo y tomado de manera más seria respecto el marco de la ley Nain-Retamal, pensando particularmente en el uso del arma de fuego por parte de los funcionarios policiales”
“Pese a que no comparto nunca retirarse de los espacios de conversación, sí creo que la discusión debe darse de manera más trasparente respecto de cuáles son los objetivos específicos que se buscan con este tipo de normativa”, agregó en entrevista con “La Mañana de Agricultura”.
Esto, porque Ramírez adhiere al concepto de “gatillo fácil” que proporciona el proyecto a las policías.
“Es entrar a una lógica de gatillo fácil, que generalmente cuando se aplican este tipo de medidas, viendo situaciones comparadas, primero las primeras víctimas no son necesariamente aquellos que están vinculados a un acto criminal, sino que se puede suscitar en cualquier tipo de situación en el ámbito de vecinos y vecinas”, dijo.
Y añadió que que esta ley “busca dar más opacidad en los procedimientos policiales, estableciendo este concepto de gatillo fácil, por ende, quitando gran parte del control civil o externo, en este caso a las instituciones policiales”.
Si la iniciativa llegara a salir del Congreso, “la postura debe ser primero ir al Tribunal Constitucional, que creo que es una herramienta a objeto de verificar la constitucional de este tipo de normativa y, segundo, ir a instancias internacionales”.