Crece el consumo de vinos sin alcohol.
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Cada vez son más las personas que se suman a la tendencia de tragos sin alcohol. Estilos de vida más sanos y livianos empujan esta elección entre los consumidores y bartenders.

Las alternativas son infinitas convirtiendo a los llamados mocktails en una opción ideal para quienes no quieren consumir alcohol, pero tampoco restarse de disfrutar sabrosos tragos en celebraciones familiares, reuniones con amigos, entre otras.

Lo cierto es que el brindis suele ser el protagonista de las diferentes veladas y qué mejor si se trata de una Sangría o Chardonnay Sour, sin alcohol.

Cecilia Prat, directora comercial de Sinzero, la primera marca chilena especializada en la producción de vinos y espumantes desalcoholizados con menos de 0,5% de alcohol, confirma que el consumo va al alza, si bien levemente, a un paso firme y seguro.

“En los últimos años, el consumo de vinos sin alcohol crece en torno al 7% anual, de acuerdo al informe de mercado de Global Market Reports de Low-Alcohol“, explica.

“Ya se instaló el hábito de tener una alternativa desalcoholizada en casa, y cada vez más el canal HORECA avanza en mantener opciones abiertas para los consumidores en esta línea, aunque aún falta por avanzar”, revela Prat.

Sinzero ha sido pionero en el país, y uno de los pocos a nivel global, en crear y perfeccionar cinco líneas de productos desalcoholizados: Cabernet Sauvignon, Chardonnay, Rosé, Espumante Brut y Espumante Rosé.

En términos de consumo, 25 copas equivalen a una copa de vino tradicional en relación con la ingesta de alcohol por litro de sangre.

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