En un reciente estudio realizado en Chile, se reveló que la motivación salarial sigue siendo una de las principales fuerzas impulsoras en la elección de un empleo para el 70% de los trabajadores del país.
Sin embargo, no es lo único relevante a la hora de decidir si quedarse en una empresa o no ¿Qué otros aspectos motivan a un trabajador?
Según datos de People Brands 2023, encuesta elaborada por BBK Group y Trabajando.com, el 73% de los trabajadores señaló que los salarios los motivan, pero el 81% indicó que una mala jefatura es motivo suficiente para querer cambiar de empleo o incluso renunciar.
Al respecto, Sofía García Franco, onboarding leader en Humand, una App que permite centralizar procesos laborales en gestión de Recursos Humanos, comentó que “estas cifras claramente nos dicen que la estabilidad económica y el reconocimiento financiero son aspectos importantes para la fuerza laboral en el contexto actual”.
“La importancia que le dan los trabajadores tiene que ver a esto de que haya coherencia entre ese ingreso y las habilidades, funciones y responsabilidades que tienen dentro de la organización”.
Sin embargo, la experta en recursos humanos subraya en que “si bien el salario es un motivador importante, la calidad de la jefatura juega un papel aún más crucial en la retención de empleados”.
“No todos los jefes son buenos líderes. Realmente un buen líder, lo que hace es potenciar los equipos de trabajo, escuchar y empatizar”, comentó.
El flujo de trabajadores y los cambios de empresa
Desde la experiencia de Humand, presente en 17 países de América, Europa y Asia, Sofía García abordó la nueva realidad de la fuerza laboral, comentando que hace algunos años existía un tipo de trabajador que podía llegar hasta su jubilación en una misma empresa, una realidad muy distinta a la de hoy, donde el colaborador puede llegar a tener 8 trabajos en su vida laboral.
“Hoy la retención no pasa solo por la parte económica, sino que también por el salario emocional. Ese salario emocional no es muy perceptible, tiene que ver con cómo se siente la persona dentro de la organización. Desde el ambiente, su tipo de trabajo, su líder, los programas de bienestar, si logra el equilibrio entre el trabajo y su vida personal, si puede prosperar y evolucionar y crecer dentro de la organización. O sea, son muchos los componentes”, afirmó.
Frente a esto, la retención se ve como una estrategia que implica fomentar la cultura organizacional, el reconocimiento continuo y la oferta de oportunidades de desarrollo profesional.
La comunicación entre miembros de la compañía
En cuanto a la comunicación interna, García destacó la importancia de abrir canales para escuchar a los empleados, aunque esto implique recibir feedback negativo. “Crear una buena cultura dentro de la organización, con canales correctos para levantar esta información, es clave. Si como organización no los abrimos, la información se termina entregando por canales informales o fuera de la organización”, asegura.
“Por eso el rol del líder es tan importante, porque a través de estos podemos entender cuáles son las necesidades de nuestros colaboradores y construir confianza con los equipos. Aquí es donde los canales de información son relevantes, pues a través de ellos se pueden levantar temas, puntos de dolor, incomodidades que tienen los equipos y con esto generar confianza. Por esto es tan importante los roles de liderazgo y los equipos de recursos humanos en las organizaciones”, añadió.
Finalmente, Sofía García comentó que si bien la búsqueda de ingresos y rentabilidad es la meta última de las empresas, es fundamental reconocer que ciertas acciones no deben considerarse simplemente como gastos, sino como inversiones estratégicas.
Invertir en programas de formación, desarrollo y tecnologías, como aplicaciones de comunicación interna, como Humand, no solo impulsa la capacitación de los empleados, sino que también mejora su rendimiento y contribuye al éxito organizacional.
“La inversión en el desarrollo y bienestar de los empleados no solo es compatible con la obtención de beneficios financieros, sino que también contribuye de manera significativa a la construcción de una cultura organizacional sólida y sostenible”, concluyó la experta.