Marco Antonio Figueroa completó su segunda jornada de entrenamientos con O’Higgins de Rancagua, tras asumir en el cargo el miércoles pasado en reemplazo de Mauricio Larriera. El “Fantasma” tendrá como primera misión levantar anímica y futbolísticamente a una escuadra que en la segunda rueda sólo ha conseguido una victoria.
“El objetivo es mejorar en lo que queda de torneo para planificar luego si se da la posibilidad. Lo primero es el partido del sábado ante Palestino, donde debemos hacer un esfuerzo enorme. Soy el técnico que debe levantar el rendimiento de los jugadores y empezar a ganar porque este equipo tiene que empezar a jugar mejor”.
Figueroa ya había sido el técnico de los celestes en la temporada 2010. “Estoy contento con la invitación a trabajar y la siento como una responsabilidad bastante grande. Me encontré con un plantel de muy buenos jugadores, creo que en calidad está por encima del que me tocó dirigir en un momento, por lo que trataremos de sacar el mejor de los provechos a los veteranos y a los jóvenes”.
Fiel a su estilo directo, el entrenador también dio un espacio para rechazar que vengan foráneos a hacerse cargo de la selección nacional. “Nunca he estado de acuerdo con que vengan técnicos extranjeros a dirigir a la Selección, porque ellos no conocen la raíz del fútbol chileno”.