Universidad de Chile tenía una misión muy difícil en su visita a Porto Alegre para enfrentar al Internacional por la vuelta de la segunda fase previa de la Copa Libertadores. Luego del 0-0 obtenido en la ida, los azules estaban obligados a convertir un gol para ilusionarse con la clasificación y amargarle la fiesta a los más de 30 mil hinchas que llegaron al Estadio Beira Rio, pero aquello no sucedió.
Víctima de sus errores y carencia de profundidad ofensiva en el primer tiempo, el elenco universitario sucumbió ante la superioridad “colorada” y se despidió de la cita continental tras caer por 2-0.
Las bajas de Osvaldo González por lesión, Walter Montillo por suspensión y la inesperada de Fernando de Paul por una fuerte gastroenteritis, obligaron a Hernán Caputto a realizar modificaciones. Una de ellas fue el ingreso de Cristóbal Campos en el arco, quien debutó profesionalmente y hasta los 43′ tenía una jornada bastante pasiva y de correctas intervenciones.
Sin embargo, un pase a Diego Carrasco y un mal control del defensa en la salida derivó en el 1-o de Boschilia antes del descanso. En el complemento la U mostró leves mejorías, pero no le alcanzaron para intimidad a un tranquilo Marcelo Lomba que prácticamente fue un espectador más en el imponente recinto gaúcho.
El 2-0 vino después de otra descoordinación en la última línea. Luis Del Pino nunca cazó la pelota y esto fue aprovechado por Marcos Guilherme, quien eludió a sus marcadores y cerró la cuenta.
Así las cosas, Universidad de Chile cerró de manera prematura su participación internacional y le dijo adiós al sueño continental.