Boca Juniors se quedó con el Superclásico argentino luego de vencer por la mínima a River Plate del chileno Paulo Díaz. Tras el encuentro, los jugadores xeneizes protagonizaron un polémico momento en el Estadio Monumental.
Una vez terminado el partido, los futbolistas de Boca comenzaron a festejar en el campo de juego y se sumaron los suplentes e integrantes del cuerpo técnico. Luego de unos minutos, un grupo de jugadores comenzó a insultar a los hinchas locales, quienes respondieron lanzando proyectiles a la cancha. Esto obligó la intervención de la Policía Federal, quienes escoltaron al plantel hasta el túnel.
Allí, según consignó la prensa trasandina, los jugadores emplearon diversos insultos contra los fanáticos: “Gallinas”, “Chupapi…”, “descendidos”, “pu…”.
Mientras se dirigían a camarines, algunos futbolistas siguieron descargándose con los fanáticos rivales, a quienes insultaron mientras caminaban al vestuario. La repudiable acción ha generado todo tipo de críticas contra los jugadores involucrados y con los hechos de violencia por parte de los barristas de River Plate.