El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, expuso ante la Sofofa los focos centrales del proyecto de ley de modernización tributaria.
El secretario de Estado calificó el encuentro como una discusión franca en la que se hicieron distintas observaciones y comentarios, los que respondió con franqueza, según publicó El Mercurio.
El jefe de las finanzas públicas dijo estar consciente de que el proyecto no va a dejar satisfechos a todos. “Quiero decirles que en materia de reducción del impuesto de primera categoría, eso se hizo para las pymes y cuenta con un amplísimo apoyo. Nosotros hemos dicho que hay dificultad fiscal en reducir el impuesto de primera categoría para todas las empresas”, enfatizó.
Asistentes del encuentro comentan que los consejeros le hicieron ver al titular de Hacienda la necesidad de bajar los impuestos a las empresas. Sin embargo, Larraín les indicó que él no tenía problema de que los gremios hablaran del tema, pero reconoció que no hay piso político para llevar a cabo esta aspiración.
Desde el gremio se le recordó la importancia de aumentar la competitividad del sistema tributario, no solo a nivel del impuesto final que paga un emprendedor y ese objetivo está en el corazón del sistema tributario integrado.
El ministro respondió con realismo y les dijo que están partiendo con un sistema que existe y no escribiendo sobre hoja en blanco, por lo que no se puede reformar todo.