Una salida masiva de veraneantes desde distintos puntos del país se prevé de cara a la temporada estival. La disminución de casos de coronavirus, en comparación al año anterior, trae consigo más libertades de desplazamiento.
Esta situación puede generar la existencia de espacios libres en el hogar durante el descanso. Desde ese punto de vista, una alternativa para amortiguar los gastos propios de las vacaciones es poner en arriendo algún espacio dentro del hogar.
De acuerdo a un artículo del Wall Street Journal, los precios de propiedades de almacenaje han subido hasta en un 25% en Estados Unidos. Pero la realidad del país de Norteamérica no es distinta a lo que pasa en el resto del mundo. En esa misma línea, Chile también experimenta baja disponibilidad de este tipo de bienes.
“Hoy, quienes más demandan estos espacios, en Chile, son pequeños y medianos empresarios por el incremento del e-commerce a raíz de las cuarentenas. Antes no necesitaban manejar tanto inventario, pero ahora, por su crecimiento sí”, explica Salvador Barros, fundador de Kipp.
Según datos de Kipp, un arrendatario de espacios para ser usados como almacenaje puede llegar hasta $214 mil. Eso sí, el valor depende de la comuna y de la cantidad de espacio que contenga la habitación que se pone en arriendo. Por ejemplo, ese valor se podría llegar a una bodega se 20 metros cuadrados.
Otra de las aristas que aborda el citado artículo periodístico refiere a lo incómodo que resulta para los arrendadores de bodegas hacer contratos a largo plazo por el dinámico cambio de las condiciones.
De acuerdo con Barros, la plataforma te da la oportunidad de fijar plazos, donde el arrendatario es quien estipula los tiempos, pero donde el arrendador también puede adecuarlo a sus exigencias. “En el formulario se fija un mínimo de un mes, pero si alguien lo necesita por una semana no hay problema. Es parte de las ventajas de arrendar con Kipp, que es súper cómodo y eficiente”.
Con todo, el arriendo de un espacio libre asoma como una alternativa para amortiguar los gastos del verano o bien, generar recursos extra, en tiempo donde todo se ha encarecido producto de la inflación a nivel mundial.