Comparte

Sobre 8 mil productos se beneficiarían con la aprobación en el Parlamento de acuerdos comerciales que el país ya tiene negociados con mercados como Indonesia, China, Argentina y Canadá, además del multilateral CPTPP. Algunos esperan desde el año pasado.

Hace algunas semanas, el nuevo embajador de Chile en China, Luis Schmidt, criticaba el lento ritmo de aprobación de los nuevos acuerdos comerciales que ha negociado Chile con otros mercados, o las ampliaciones de acuerdos ya vigentes, pese al impacto positivo que traerían para el sector silvoagropecuario chileno una vez que entren en vigencia.

Refiriéndose a tratados que ya están cerrados con la otra parte desde el año pasado, como la ampliación del acuerdo comercial con China y con Canadá, el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Indonesia o el multilateral Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico -más conocido como CPTPP, por su sigla en inglés-, el ex presidente de Fedefruta apuntaba en una entrevista con “Revista del Campo” a la lentitud por el lado del Congreso chileno, que debe ratificar en ambas cámaras los acuerdos para que puedan publicarse en el Diario Oficial y entrar en vigencia, lo que hasta ahora no ha ocurrido.

“¡Qué diablos están esperando! ¡Es absurdo que hayamos hecho todo ese trabajo y que no pase por el Parlamento!”, fueron algunas de las críticas de Luis Schmidt.

El calendario legislativo le da la razón.

En el caso de la ampliación del acuerdo comercial entre Chile y China, cuyas negociaciones concluyeron a fines de octubre del año pasado, el documento recién tiene aprobado su primer trámite constitucional en la Cámara de Diputados, por lo que aún está pendiente que sea revisado por el Senado, antes de votarse la aprobación final.

En esa etapa en la Cámara Alta está el TLC con Indonesia, que se suscribió en diciembre de 2017 y, por tratarse de un acuerdo nuevo, cuando entre en vigencia traerá ventajas arancelarias importantes para varios productos silvoagropecuarios.

Mucho más atrasada está la discusión para aprobar el CPTPP, que firmaron los 11 países que serán miembros a comienzos de marzo de este año en Santiago, y que pasará a ser uno de los tres mayores tratados económicos a nivel mundial, pero que en Chile aún no se despacha desde la Secretaría General de la Presidencia (Segpres) al Congreso, según los datos entregados por la Direcon.

“En promedio, un acuerdo debería tomar entre dos y tres meses de tramitación en el Congreso, pero depende mucho de la agenda legislativa y de la urgencia que el Poder Ejecutivo le pueda imprimir”, explica el director de asuntos económicos bilaterales de la Direcon, Felipe Lopeandía.

Por qué la lentitud

Quienes conocen el proceso para la aprobación de un acuerdo comercial comentan que, en el caso de los tratados que están por ratificarse en el Poder Legislativo, una de las razones de la demora sería el cambio de parlamentarios que hubo luego de las elecciones y la alta carga de proyectos de ley y temas por votar en ambas cámaras.

En el caso del acuerdo de ampliación con China, por ejemplo, su discusión ha estado en más de dos ocasiones en tabla, pero no se votado por falta de tiempo.

Felipe Lopeandía afirma que lo que ha ocurrido es que existe una agenda muy nutrida de acuerdos en el Congreso, y detalla que algunos sí se han aprobado en estos meses, como el tratado con Uruguay, que entraría en vigencia en las próximas semanas.

También está en proceso el acuerdo de profundización con Canadá, que se está discutiendo en la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, por donde es obligatorio que pasen todos los tratados, al igual que por la Comisión de Hacienda, antes de su discusión en general.

“En el acuerdo bilateral con Argentina, que ya pasó por las comisiones de Relaciones Exteriores y Hacienda, se ha dado un caso especial y está en la Comisión de Agricultura, porque solicitaron revisarlo, y por eso ha tomado más tiempo”, explica.

En todo caso, Lopeandía advierte que durante el proceso en el Parlamento, la Direcon mantiene conversaciones permanentes con su contraparte del otro país, para informar cómo avanza el proceso y cuándo se completa la tramitación, con el objetivo de que ambas partes logren que entre en vigencia al mismo tiempo.

“Si alguno se adelanta un poco, tendrá que esperar lo que sea necesario para que el otro lo alcance y el acuerdo entre en vigencia simultáneamente”, aclara, y precisa que el objetivo que se han fijado es tener todos los acuerdos aprobados durante 2018.

El CPTPP

Luego de varios años de negociaciones y la salida de Estados Unidos por decisión del Presidente Donald Trump, se estima que el CPTPP -conocido como Acuerdo Transpacífico o TPP, que enfrentó oposición en distintos países- sea ratificado sin problemas.

Esto, porque, además, el Congreso solo tiene las facultades para aprobar o rechazar un acuerdo, y nunca ha ocurrido un rechazo.

“Ya se encuentra en la Segpres y probablemente va a entrar en los próximos días a la Cámara de Diputados para iniciar su tramitación. Nos tomamos un poco más de tiempo en elaborar los documentos, porque es un acuerdo grande, complejo, al que nos interesa ir bien preparados y tener una discusión completa y detallada”, explica Felipe Lopeandía.

El jefe del Departamento de Asuntos Internacionales de Odepa, José Miguel Rodríguez, añade que el requisito mínimo para que pueda entrar en vigencia el CPTPP es que lo ratifiquen seis de los 11 países miembros, lo que todavía no ha ocurrido.

Y, pese a que Chile ya tiene tratados bilaterales con todos los socios -Australia, Brunei, Canadá, Malasia, México, Japón, Nueva Zelandia, Perú, Singapur y Vietnam, que en conjunto representan el 11% de la economía mundial-, la entrada en vigencia del CPTPP traerá nuevas ventajas para el agro, especialmente en mercados como Japón, Malasia y Vietnam.

“Tenemos ciertos beneficios arancelarios en productos en que inicialmente teníamos exclusiones, y con este nuevo acuerdo acotamos los plazos de desgravaciones, cuotas y otras ventajas”, afirma José Miguel Rodríguez.

Interés por India

Una de las dudas entre los exportadores chilenos es si, de haber tenido incorporadas las nueces en la negociación del acuerdo de alcance parcial que selló Chile con India el año pasado, y que ya está vigente, los hubiese afectado el alza de aranceles que decretó ese país para el fruto seco a mediados de este año, que pasó de 30% a 100%.

Desde la Direcon y Odepa aclaran que las nueces chilenas no estuvieron consideradas en esa negociación, por lo que la decisión del gobierno indio es legal y Chile no tiene cómo quedar excluido, pero insisten en que está el interés por buscar una solución.

“Si hubiesen estado incluidas en el acuerdo, no nos hubiesen podido subir unilateralmente los aranceles (…). Estamos buscando la instancia para plantear a los indios la necesidad de incluirlas, para que en una próxima negociación podamos definir un plan de acción”, proyecta José Miguel Rodríguez.

Sin embargo, los exportadores no están optimistas y consideran que se deben tomar medidas de corte político, aun cuando reconocen que las autoridades chilenas han actuado rápido.

“Se nos ha dado a entender que la orden de subir los aranceles salió de la oficina del Primer Ministro, y como es un país muy jerárquico, nadie puede cambiar esa orden, por lo que nos piden enviar una carta del Presidente de Chile para que el tema recién pueda ser escuchado”, detalla el presidente de Chilenut, Nicolás Di Cosmo.

Sobre la situación puntual de Chile, añade que es un proveedor de contraestación, que no compite con la producción local, sino que la complementa, ya que se comenta que una de las razones detrás del alza de aranceles fue el proteccionismo.

Tampoco tienen un futuro fácil en otros mercados, porque son de muy difícil apertura, como Irán y Jordania, que compran nueces chilenas a través de Dubái y Turquía, pero sin conocer su origen.

Seis países mínimo deben ratificar el CPTPP para que entre en vigencia.

2 a 3 MESES toma normalmente tramitar un TLC en el Congreso.

Fuente: Revista del Campo

Últimas Noticias