Luego de casi año y medio en pantalla, Perdona Nuestros Pecados llega a su fin este miércoles.
Si bien son solo tres capítulos los que quedan por ser emitidos, los fanáticos tienen varias teorías sobre qué personajes podrían morir, y según La Cuarta, hay cinco de ellos que estarían en mayor peligro.
La primera es Bárbara, debido a que en el adelanto lanzado la semana pasada se puede ver entrando ensangrentada al hospital en una camilla.
Esto ha dado paso a que los seguidores de la teleserie de Mega tengan dos opciones de los hechos: una sería que los habitantes de Villa Ruiseñor la agrederían físicamente, mientras que la segunda sería que los malos tratos de la gente y de su marido producirían un alto nivel de estrés en la profesora, poniendo en riesgo su vida y la de su hijo.
Otro de los personajes que parece estar en riesgo sería Isabel Quiroga. La locura de la hija de Armando la llevaría a atentar contra todos quienes estén en su paso, incluyendo a su padre y su nueva esposa Lucrecia.
Algunos de los fanáticos piensan que Ángela la ayudaría con el plan para no tener que ensuciarse las manos, pero al momento de descubrir que Isabel también querría matar a su padre, Bulnes atentaría contra ella.
Armando Quiroga es uno de los personajes con más opciones de morir, ya que tiene una larga lista de enemigos, entre ellos Isabel por sentirse traicionada, el ex padre Reynaldo por violar y asesinar a su hermana, y su hermano Ismael para cumplir su promesa de sacarlo de este mundo.
Ángela Bulnes también está en la lista de los fanáticos, quienes creen que Isabel podría matarla por ser amante de su padre. Sin embargo, el último avance las mostró muy cómplices, lo que bajó la popularidad de esta teoría.
Por otro lado, hay quienes creen que Nicanor sería quien la mate, ya que no soportaría descubrir que tiene un romance con el alcalde Casagrande.
Finalmente, Lucrecia estaría en riesgo, como ya se dijo, debido a la obsesión de Isabel con su padre. Al intentar casarse con Armando, la hija mayor de Quiroga terminaría con su vida.
