El presidente francés, Emmanuel Macron, se declaró este jueves dispuesto a “abandonar” el objetivo de suprimir 120.000 puestos de funcionario que se había fijado “si no es soportable”, y pidió al Gobierno que de “su análisis antes de verano”.
“Cuando debemos reinvertir en seguridad, en educación y en justicia, no voy a dar órdenes contradictorias al Gobierno”, declaró el jefe del Estado Francés en una rueda de prensa en el Elíseo.
Asimismo, recalcó que asumiría “totalmente, si no es soportable, abandonar ese objetivo”.
En la rueda de prensa, el presidente francés tenía previsto presentar “medidas concretas” al término de una gira por todo el país, el llamado “gran debate nacional”, en busca de una salida a la crisis de los “chalecos amarillos”, un movimiento social que reclama mayor justicia social y fiscal y que ha protagonizado protestas callejeras semanales desde el pasado noviembre.
AFP