Por más de una hora estuvieron reunidos este viernes, el ministro de Defensa, Alberto Espina, y el comandante en jefe del Ejército, general Ricardo Martínez, para aclarar los dichos que se hicieron públicos sobre que oficiales y suboficiales compraban armas, luego las daban por perdidas y las vendían al crimen organizado o a narcotraficantes.
Luego de este encuentro no solo pidió disculpas y aseguró que se pondrán todos los antecedentes en manos del Ministerio Público, sino que además reconoció que “esta situación no fue informada en su momento al ministro de Defensa, ya que quedó radicada en los tribunales competentes”.
Añadió a esto que tienen como objetivo reforzar una política de transparencia, probidad y apego a la disciplina, como se indica en El Mercurio, donde se detalla que solicitará una audiencia con la ministra Romy Rutherford, que investiga el uso de pasajes.
Según el medio y quienes conocieron de la reunión entre el ministro y el general, “Espina le habría exigido una comunicación fluida y oportuna sobre temas tan relevantes como la denuncia sobre venta ilegal de armas. También le habría hecho ver la necesidad de enviar los antecedentes al Ministerio Público, pese a que la denuncia ya se encontraba en la justicia militar”.
La reunión realizada ayer entre ambas autoridades, habría sido solicitada por el Presidente Sebastián Piñera, quien agregó que “el comandante en jefe entregó esa información, ha dado su explicación y esa es la forma transparente y rápida con la que actúa nuestro gobierno”.
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