Más de 3 mil estudiantes estarían sin matrícula a lo largo de todo el país, situación que fue desestimada por la subsecretaria de Educación, Alejandra Arratia.
“No es un número que nosotros hayamos dado, tampoco que podamos ratificar. Hemos sido muy cuidadosos y quiero reiterar esa precaución; no tenemos esa (información). El único número que hemos compartido es que hay 1.700 estudiantes que están doble matriculados”, aseguró la autoridad durante este jueves.
En ese sentido, la Presidenta de Escuelas Abiertas, María Teresa Romero, explicó en “La Mañana de Agricultura” cómo surge la situación y qué soluciones se asoman ante la contingencia.
“El Estado no puede correr riesgos en inversión, pero los privados sí. Aquí se necesita no solo que el Estado partícipe en la educación, sino que necesita la colaboración público-privada”, inició.
Bajo ese contexto, Romero argumentó que el Sistema de Admisión Escolar (SAE) “está demostrando que necesita ser modificado. Por otro lado, requerimos que estén los incentivos y se elimine burocracia para que nuevas organizaciones, sostenedores y privados también vengan aquí a aportar y hacer nuevos proyectos educativos”.
Además, aseguró que han conversado con autoridades de la cartera para abordar el hecho, que ella misma catalogó como una “emergencia”. “Esa es la urgencia que tiene ahora el ministerio para instalar lo antes posible nuevas salas de clase, ya sean modulares, pero en lugares con calidad de educación”, dijo.
Situación en Atacama
En esa misma línea, durante los últimos días Escuelas Abiertas constató en terreno lo ocurrido en establecimientos de la Región de Atacama.
En la instancia, también fiscalizaron cómo se está implementando el servicio local de educación.
“Ahora que quisimos volver para comprobar que todos los colegios estuvieran abiertos, conocimos a Cecilia Brito del servicio local de educación pública, que está haciendo una gestión tremenda. El problema es que hace un tiempo no hubo ninguna cabeza a cargo (…). La implementación, el diseño de esta nueva educación pública tiene que ser arreglada y modificada”, sumó.
“Aquí necesitamos apuntar hacia la sala de clases, hacia los aprendizajes de los estudiantes”, concluyó.