Experto entregó recomendaciones durante estos días de verano para una cuidadosa manipulación de la carne congelada con respecto al calor y así evitar intoxicaciones en nuestro cuerpo.
Estos consejos apuntan a ejecutar medidas de resguardo y no consumir el alimento en mal estado, ya sea, durante viajes al aire libre o parrilladas.
Ante esto, desde Álvaro Martínez, Gerente Comercial de la cadena carnicera, “Doña Carne” destacan tres señales clave para identificar si la carne se conservó de la manera adecuada y mantuvo su cadena de frío, que es lo fundamental para evitar molestias estomacales.
“La carne debe tener aroma fresco o neutro, de color rojo o rosa, dependiendo del corte, y la textura debe ser consistente. Si la carne no presenta estas características, su olor es desagradable, el color es más oscuro, ya estaría en proceso descomposición y se debe desechar”, indicó.
Estar atentos a las etiquetas y rótulos para evitar intoxicaciones
La normativa de etiquetado debe incluir recomendaciones de conservación, fecha de vencimiento y detalles sobre el lugar de procesamiento y envasado, asegurándose de que sea un establecimiento autorizado por las autoridades sanitarias.
Respecto al descongelamiento, el Gerente Comercial de Doña Carne, señaló que “es común dejar el trozo de carne fuera del congelador por horas antes de cocinarlo”.
Sin embargo, enfatizó que “es un error”, hacer dicha acción con los alimentos que se encuentran en estado de congelación.
“El procedimiento ideal es bajarla del freezer al refrigerador entre 10 y 20 horas antes de cocinarla —dependiendo del corte— así se mantiene un descongelamiento progresivo pero sin perder la cadena de frío”.
Con esta información sencilla, pero clave, se puede evitar intoxicaciones peligrosas y enfermedades estomacales en estas vacaciones.