El Everton no lo está pasando bien en la Premier League. El cuadro dirigido por Frank Lampard sumó una nueva derrota, esta vez ante el West Ham, en Londres, por 2 a 1. Y es que el equipo del ex futbolista suma siete derrotas en los 11 partidos que ha estado en la banca y se complica con el tema del descenso.
Pese a que los Toffes aún tiene tres partidos para poder repuntar, están a solo tres puntos de caer a zona de descenso y el duelo de este miércoles ante el Burnley, rival directo del equipo de Merseyside asoma como una final.
Pero lo llamativo de todo esto es que el Everton es el equipo con la plantilla más valiosa de los que pelean en los puestos de descenso, con un plantel valorado en 447,75 millones de euros, según datos del portal Transfermarkt.
Y es que tienen en su plantilla, por ejemplo, al islandés Gylfi Sigurdsson como fichaje más caro (49,4 millones de euros) y hasta 12 jugadores por encima de los 20 ‘kilos’: Doucouré (22 millones de euros), Cenk Tosun (22,5), Mykolenko (23,5), Allan (23,6), André Gomes (25), Godfrey (27,5), Pickford y Michael Keane (28,5 cada uno), Yerry Mina (30,25), Iwobi (30,4), Richarlison (39,2) y el anteriormente mencionado Sigurdsson.
Esta diferenciación se nota más cuando se considera a los tres equipos que pelean abajo, donde la plantilla del Watford, Burnley y Norwich tienen un valor de 140, 142 y 146 millones de euros, respectivamente.
Lo anterior representa una situación anómala, por la importante diferencia de valoración de sus plantillas. Además, se podría dar un hecho inédito en los últimos 71 años. Y es que el Everton nunca ha descendido desde que la competencia se llama Premier League (1992/1993). De hecho, la última vez que jugó en la Champioship fue en 1951.