En el proceso de elegir entre las diversas bicicletas que existen en el mercado, siempre es recomendable considerar tu contexto y el uso que esperas darle a tu nuevo medio de transporte. Si eres una persona que vive en la ciudad y quieres trasladarte fácilmente para disfrutar de todo que la urbe tiene para ofrecer, sigue leyendo para conocer por qué deberías optar por una bicicleta urbana.
¿Cuáles son las bicicletas urbanas?
Las bicicletas urbanas, también conocidas como utilitarias, son modelos de estilo holandés que resultan muy convenientes y cómodas, ya que te permiten transportarte vistiendo cualquier tipo de zapato o ropa, razón por la cual se consideran un transporte de uso cotidiano.
Suelen tener un manubrio tipo porteur o north road, los cuales se curvan hacia tu rostro, permitiendo que tu espalda quede erguida y tus brazos relajados. Asimismo, su cuadro tiende a ser muy resistente, por lo que es posible llevar cargas como mochilas o canastas pesadas.
Ventajas de tener bicicletas urbanas
1. Es un transporte fácil y funcional
Además de ser muy cómodas, las bicicletas urbanas están pensadas para ser fáciles de usar en el trajín de la vida citadina. Su cuadro es más bajo que en otros modelos, por lo que resulta más fácil subir y bajar y, generalmente, tienen un sillín con suspensión que ayuda a amortiguar las irregularidades de la calle para hacer de tus trayectos más fluidos.
2. Te ayuda a ahorrar tiempo y dinero
Con una bicicleta puedes dejar atrás las esperas que implica tomar el transporte público, ya que tienes la capacidad de salir en el momento que decides, sin interrupciones ni paradas extra. Además, puedes ahorrar el dinero que gastarías en pagar un pasaje cada vez que tengas que trasladarte.
Por otro lado, las bicicletas urbanas suelen estar compuestas de materiales sumamente resistentes como el acero y es común que cuenten con cubrecadenas completos, lo que significa que tienen una vida útil mucho más larga y sus gastos de mantenimiento son mínimos.
3. Son una alternativa de transporte ecológica
Se estima que en Chile, el sector del transporte produce el 42% de las emisiones contaminantes para el medioambiente y una buena alternativa para aplacar estos efectos es que las personas comiencen a utilizar más bicicletas para trasladarse.
Es más, en los Países Bajos, un 53% de la población usa la bicicleta como medio de transporte al menos dos veces a la semana, y de acuerdo a un estudio reciente, si el resto del mundo se uniera a esa práctica se podrían evitar más de 600 millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono al año.
4. Promueves tu salud física y mental
Andar en bicicleta es una excelente alternativa de ejercicio que impulsa tu salud integral, ya que involucra a todo tu cuerpo. Entre sus diversos beneficios, esta actividad reduce el riesgo de infartos, da alivio a los dolores de espalda y ayuda a disminuir el colesterol.
Asimismo, debido a que el ejercicio libera endorfinas y el pasar tiempo al aire libre tiende a mejorar el ánimo, andar en bicicleta puede ayudar mucho a la salud mental, permitiendo bajar los niveles de estrés, lo cual es una necesidad cuando se habita en urbes.
Como puedes ver, las bicicletas urbanas son una inversión que hace de la cotidianidad mucho más llevadera, con importantes ventajas para tu tiempo, bolsillo y salud que te permiten renovar tu amor por la vida en la ciudad.