En el minuto 88 de la histórica goleada de Liverpool sobre Manchester United ocurrió una particular situación. Luego que Roberto Firmino marcara el séptimo gol de los reds, un aficionado saltó a la cancha para participar del festejo junto a sus ídolos.
Sin embargo, esta acción pudo traer graves repercusiones. Y es que, al acercarse a los jugadores, el fanático resbaló y golpeó de forma accidental a Andrew Robertson, quien se lanzó al suelo con evidentes muestras de dolor en uno de sus tobillos.
Mientras Robertson era atendido, el agresor fue retirado por la seguridad del estadio ante el enojo de Jürgen Klopp, quien encaró al fanático por su irresponsabilidad. Afortunadamente para el lateral escocés, la situación no pasó a mayores y pudo terminar el partido sin inconvenientes.
Pero esta jornada Liverpool anunció que inició una investigación para identificar al aficionado que invadió el campo para imponer una sanción ejemplar. “Si es declarado culpable del delito de ingresar al campo sin permiso, el infractor podría enfrentar antecedentes penales y una prohibición de por vida de Anfield y todos los estadios de la Premier League”, informó el club.