Este sábado el fiscal regional de Tarapacá, Raúl Arancibia, se refirió al caso del joven chileno secuestrado en Bolivia, y al aumento en Chile de este tipo de secuestros.
“En los últimos años, a raíz de la tremenda inmigración que hemos sufrido, han ingresado al país no solo delincuentes muy peligrosos, sino que también nuevas formas de delinquir”, señaló a Meganoticias.
“No tenemos por qué pensar que no vamos a llegar a vivir una situación tan grave como la de otros países. Yo creo que no se puede hablar aun de una industria, pero desgraciadamente si está empezando”, agregó.
En la misma línea, el fiscal regional sostuvo que “siempre hemos tenido una cantidad de secuestros que se producen entre bandas delictuales, y eso es algo normal entre ellos para ajustar sus cuentas, pero esta conducta ha ido traspasándose a personas que no están vinculadas al ámbito delictual”.
“Lo que hemos visto es que eligen a la persona, que generalmente es en cierto modo conocida de sus secuestradores“, señaló, agregando además que este delito “generalmente no ocurre en forma violenta. Todavía no conocemos de datos de secuestros violentos en las calles, por ejemplo, sino que han sido abordados en otras circunstancias”.
De esta forma, los secuestradores llevan a la víctima “a una casa segura y empiezan las extorsiones, los llamados, los envíos de videos donde la persona es maltratada, y estos son enviados por lo general desde el extranjero, y es ahí donde empieza”.
“A nosotros nos ha pillado de sorpresa, porque no estamos debidamente preparados, ya que no tenemos experiencia. Nos pilló la máquina porque hemos vivido un verdadero tsunami de inmigración en los últimos dos años, donde ha pasado de todo”, remarcó.
“No estamos preparados para recibir esa cantidad de gente, para identificar a los delincuentes, ni para prepararnos para todo lo que se ha venido en nuestras ciudades. Nos tomó de sorpresa muchos de estos delitos tan graves”, cerró el fiscal.