El canal estatal Televisión Nacional de Chile (TVN) atraviesa una de las crisis económicas más graves de su historia reciente. Así lo reconoció su directorio a través de una declaración pública emitida esta semana, donde advierten que “las condiciones expuestas bajo el actual modelo de televisión pública hacen imposible la viabilidad económica de la empresa“.
En el documento, la plana directiva de TVN también fue tajante en señalar que no permitirán seguir incrementando el endeudamiento para cubrir el gasto corriente, calificando esa alternativa como “irresponsable”. La situación es crítica: en 2024, la estación registró pérdidas por $18.534 millones, las más altas en casi una década.
El comunicado ha generado inmediatas reacciones en el Congreso, donde varios parlamentarios manifestaron preocupación por el destino del canal y plantearon la necesidad de replantear su modelo de funcionamiento e incluso su existencia como empresa estatal.
El diputado Frank Sauerbaum (RN) sostuvo que “no estamos en condiciones de mantener empresas que no son eficientes” y se mostró partidario de evaluar su privatización. Además, cuestionó la capacidad de TVN para adaptarse a la era digital, con competencia directa de plataformas en redes sociales y nuevas tecnologías como la inteligencia artificial. “Si no tenemos un canal estatal que se adapte a esta nueva realidad, los chilenos seguirán financiando pérdidas permanentes”, afirmó.
En la misma línea, el diputado Gustavo Benavente (UDI) declaró que TVN “es una empresa inviable” y que se necesita una decisión de fondo sobre el tipo de televisión pública que el país desea. “El modelo actual seguirá generando pérdidas al Estado”, enfatizó.
Desde una postura más moderada, el diputado Sebastián Videla (Ind.) propuso una “reestructuración total” de TVN que incluya su estructura, modelo de financiamiento y visión de largo plazo. Por su parte, la diputada Viviana Delgado (PL) admitió que “TVN está en crisis” y que no se puede seguir recurriendo a préstamos para sostenerlo. “Es momento de un rediseño serio para salvar la estación”, apuntó.
Por otro lado, el senador Esteban Velásquez (FRVS), integrante de la Comisión de Cultura, coincidió en la necesidad de revisar el modelo, pero defendió la continuidad de un canal estatal. “TVN no puede seguir funcionando con las características de un canal privado”, advirtió. Velásquez abogó por una propuesta que permita a la televisión pública cumplir su rol social: integrar al país, comunicar, educar y fomentar la identidad nacional. “Hoy día también comunicar es hacer soberanía”, subrayó.
La discusión se instala en un momento clave para los medios públicos en Chile, donde las presiones financieras, los cambios tecnológicos y las transformaciones culturales obligan a una reflexión de fondo sobre el papel que debe cumplir una televisión estatal en el siglo XXI. Mientras tanto, el futuro de TVN sigue en incertidumbre.
