
En entrevista con Cristina González en el programa La Mañana de Agricultura, el exfiscal Regional de O’Higgins, Emiliano Arias análizó el proceso judicial contra el exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, acusado de violación y abuso sexual. Arias examinó los argumentos presentados por la defensa y la Fiscalía, aportando una visión técnica sobre los desafíos y fortalezas de ambas partes en un caso de alto perfil.
Para Arias, la defensa de Monsalve, que argumentó que la exautoridad carecía de memoria sobre los hechos ocurridos, evidenció debilidades desde el principio. “Es difícil construir una teoría basada en un hecho negativo, como la falta de memoria. Si yo digo algo, tengo que acreditarlo con un mínimo estándar”, explicó.
El exfiscal destacó que la Fiscalía presentó pruebas contundentes, como videos y testimonios, que refutaron las declaraciones iniciales de Monsalve. Según Arias, estos elementos fortalecieron la hipótesis de la Fiscalía de que el exsubsecretario estaba más consciente de lo que había afirmado. “Los videos contradicen la versión de la defensa. Eso pone a Monsalve en una situación complicada”, agregó.
Además, Arias cuestionó la efectividad de la línea argumental adoptada por los abogados defensores. “Si bien no están obligados a probar nada, es evidente que al presentar una teoría activa se expusieron a las pruebas en su contra”, señaló.
Los retos de la Fiscalía
A pesar de los logros iniciales de la Fiscalía, Arias advirtió sobre los desafíos que enfrentará en el juicio oral. Según el exfiscal, el núcleo del caso radica en demostrar lo ocurrido dentro de las cuatro paredes donde presuntamente se desarrollaron los hechos. “La relación sexual es el centro del caso. Si la defensa logra instalar una duda razonable sobre el consentimiento, podría haber una absolución”, afirmó.
No obstante, destacó que la Fiscalía ha manejado con solidez los primeros pasos del caso. “El juez del Séptimo Juzgado de Garantía dio crédito a los elementos presentados, lo que permitió dictar la prisión preventiva. Pero la prisión preventiva no implica culpabilidad. Son estándares diferentes”, aclaró.
Más allá del ámbito legal, el abogado destacó las implicancias políticas y sociales del caso Monsalve, dado el alto cargo que ocupaba el acusado. “Es un caso emblemático no solo por la gravedad de las acusaciones, sino también por la figura pública de Monsalve y su rol en temas de seguridad”, subrayó.
El exfiscal añadió que los procesos judiciales de alto perfil suelen estar sometidos a un escrutinio público mucho más intenso, lo que genera presión tanto para las partes involucradas como para el sistema judicial.
Arias cerró su análisis resaltando la importancia de que tanto la Fiscalía como la defensa cumplan con los estándares más altos durante el proceso. “Esto no se trata solo de un caso mediático. Es un recordatorio de que en la justicia penal, cada prueba cuenta y cada argumento debe sostenerse”.