La ministra de Bienes Nacionales, Marcela Sandoval, aclaró este miércoles que la compra de la casa de Salvador Allende, en copropiedad con la ministra de Defensa Maya Fernández, aún no está finalizada. El acuerdo alcanzado por $933 millones fue anunciado el 31 de diciembre como parte de un proyecto para crear casas museo en honor a los expresidentes Allende y Aylwin.
Sandoval explicó que “la adquisición no está finalizada” y que “estamos recién en una etapa muy inicial”, refiriéndose a la toma de razón por parte de la Contraloría. Esta es solo una “primera etapa” del proceso, que aún debe pasar por diversas etapas legales antes de la compra definitiva. “Faltan distintas etapas”, enfatizó, dejando claro que la compra no está completada.
En cuanto a si el gobierno cometió un error al anunciar la compra, Sandoval subrayó la importancia de “poner en valor la memoria de los expresidentes elegidos democráticamente”. Aclaró que, aunque el gobierno continuará con la compra de la residencia de Patricio Aylwin, no avanzará con la de Allende debido a la situación con los herederos del expresidente. “Hoy sí consideramos que en la actual condición de la comunidad de herederos de la familia Allende, no podemos continuar con la adquisición de esta residencia,” explicó.
Defensa del actuar de la Contraloría
Sobre si el Ejecutivo desconocía que la casa era copropiedad de la ministra Fernández, Sandoval defendió el actuar de la Contraloría, afirmando que “la Contraloría General de la República es un órgano autónomo” y que el proceso ha sido legal. Reiteró que el gobierno sigue en la “primera etapa” y que la compra de la casa de Allende no se concretará por ahora.
La situación ha generado un intenso debate sobre posibles conflictos de interés debido a la implicación de Fernández en la propiedad.
