El exconvencional Fuad Chahín (DC) señaló en entrevista con “La Mañana de Agricultura” que “lo mejor para Chile es votar Rechazo, para después darnos una Constitución como el país de merece”.
En ese contexto, respaldó la propuesta de los parlamentarios que propusieron rebajar a 4/7 el quórum para reformar la actual Constitución.
“Eso es lo que permite que podamos tener consistencia con lo que votamos el 25 de octubre del 2020. Si es que gana el Rechazo, como es muy probable que ocurra, así como están ocurriendo las cosas… mientras más conocen el texto, más se inclinan por el Rechazo, y se da cuenta que toda la maravilla que se promete, o los derechos sociales, es una ilusión que es imposible que se cumpla, y la gente no es tonta”, dijo.
“La gente se da cuenta que para los derechos sociales no estén en el papel, siendo que efectivamente sea una realidad se necesita una gobernabilidad, estabilidad política, se necesita prosperidad económica, y eso de dividirnos en naciones, en regiones autónomas, comunas autónomas, territorios especiales indígenas, territorios especiales sistemas jurídicas distintos… lo único que va afectar es aquello, por lo tanto es imposible que los derechos sociales se cumplan“, agregó.
En ese sentido, si gana el Rechazo, los 4/7 son “una salida política de toda lógica, que permite a no dar un salto hacia atrás, sino que afectivamente abrir una puerta hacia el futuro” y “hacer los cambios de manera razonable y no refundacionales como lo que propone la Convención”.
Añadió que “creo que tiene cosas buenas la propuesta de la Convención, no todo es malo, me hubiese encantado el Aprobar para reformar, pero lamentablemente las cosas estructurales, que son toda materias protegidas en la propia propuesta de Constitución y, por lo tanto, va a ser imposible prácticamente cambiarla”.
Chahin propone que para continúe el proceso constitucional se debiera “tomar lo mejor del proyecto de Bachelet, que tú tienes un proceso de participación ciudadana que lo respalda (…), y lo mejor de la propuesta de la Convención. No tirarla a basura, sino que rescatar los textos positivos y que desde ahí se proponga en breve tiempo, no más allá de seis meses – no podemos seguir con demasiada incertidumbre- una nueva propuesta para que vaya a plebiscito, que ojalá, como la Constitución española, tenga una aprobación del 90% y sea un factor de unidad y reencuentro de los chilenos”.
Según el exparlamentario, lo que requiere el país es “un sistema coherente. No podemos tener un sistema que prometa los derechos de sociales de Finlandia, pero que tenga un sistema político de Camerún, la plurinacionalidad de Bolivia, una forma de Estado que nos desintegra y que dinamite el Poder Judicial. Es como tener una carrocería de un auto con el motor una motocicleta, con los cambios de un camión y las ruedas de un tracto, eso no va a funcionar”.