La senadora Paulina Núñez, de Renovación Nacional, abordó la polémica por la compra de la casa del expresidente Salvador Allende, señalando que este caso podría derivar en la pérdida de los cargos de la ministra Maya Fernández y la senadora Isabel Allende.
En conversación con”La Mañana de Agricultura“, de Radio Agricultura, Núñez calificó la situación como “grave” y pidió que el Tribunal Constitucional (TC) se pronuncie para esclarecer si la transacción infringió la Constitución, que prohíbe a ministros y parlamentarios celebrar contratos con el Estado.
“Estamos frente a un típico caso de superioridad moral con el que nos tiene acostumbrado el Gobierno. Esto debió revisarse con detención. No se puede firmar un contrato de este tipo“, afirmó de inicio.
Una cadena de responsabilidades
Núñez también cuestionó el rol del Gobierno y las instituciones que participaron en el proceso. “A mí no me cabe en la cabeza que esto no se haya revisado por los abogados“, expresó, subrayando que el contrato involucra “a una ministra y a una senadora“.
Sobre la salida de la ministra de Bienes Nacionales, comentó que fue un intento del Gobierno por calmar los ánimos, pero aseguró que no solucionará el problema de fondo. “Yo siento que la salida de la ministra, en vez de bajar los ánimos, termina exacerbándolos más“, afirmó, insistiendo en que el caso debe analizarse con máxima seriedad.
Lo que está en juego
De acuerdo con Núñez, el caso podría derivar en una revisión crítica por parte del Tribunal Constitucional. “El Tribunal Constitucional lo que va a tener que hacer es determinar si Isabel Allende y Maya Fernández pueden permanecer en sus cargos“, señaló. Además, subrayó la gravedad de la situación al referirse a las implicancias legales y éticas: “Esto es bien delicado”.
Finalmente, cuestionó que ninguna de las personas involucradas advirtiera el conflicto de interés que suponía la firma de este contrato. “Es grave que, conociendo la norma, igual hayan decidido avanzar. Eso es lo preocupante“, concluyó.
