Según autoridades de seguridad y justicia de Estado Unidos, el acto fue atribuido a la banda salvadoreña, MS-13.
Damaris Reyes Rivas de 15 años, fue asesinada en enero de este año por miembros de la banda de origen salvadoreño Mara Salvatrucha (MS-13) considerada una de las pandillas más peligrosas que se pueden encontrar en el crimen organizado.
Durante esta semana, se imputó a Wilmer Sanchéz Serrano, quien fue el primer imputado de los 10 acusados de matar a Reyes.
Lo llamativo del caso fue la agresividad con la que actuó la MS-13, ya que los mismo miembros de la pandilla grabaron el momento cuando apuñalaban a la víctima, quien fue acusada por los propios salvadoreños de la muerte de uno de sus integrantes, Christian Sosa, quien había tenido relaciones con Damaris.
Gracias a los videos hechos por la pandilla, se pudo identificar a los participantes del asesinato. La primera fue Venus Romero, de 17 años, quien apuñaló en 13 ocasiones a Reyes, además borró con un cuchillo, un tatuaje que tenía la víctima. Otro imputado es Wilmer Sánchez, de 22 años quien le rompió el cuello a Damaris con un palo.
Tres de los 10 miembros involucrados se han declarado culpables. El juez del caso, ya adelantó que Venus Romero será imputada como adulta, pese que que era menor de edad al momento del asesinato.
