Ya estaba casi todo listo para la llamada “Noche Caturra”, amistoso que enfrentaría a Colo-Colo y Santiago Wanderers en Valparaíso el 9 de enero a las 18:00 horas. Sin embargo, durante la tarde del pasado martes, la Delegación Presidencial Regional de Valparaíso decidió suspender el encuentro.
Mediante un comunicado, el organismo explicó su decisión, manifestando que Wanderers “no cumplió con los requisitos administrativos requeridos, ni en tiempo, ni forma, situación que se refleja en tres informes de factibilidad negativos entregados por Carabineros”.
Ante esto, el gerente deportivo de Santiago Wanderers, Luis Sánchez, salió a comparecer ante la prensa y no pudo ocultar su tristeza ante la no realización del cotejo.
Entre lagrimas, Sánchez manifestó que la situación le acompleja, y declaró: “me da pena por los hinchas. La explicación que puedo dar es que, lamentablemente, a los eventos deportivos masivos aquí no nos quieren, por lo tanto, es muy difícil hacer algo acá” comentó apenado el dirigente.
Además, confesó que no existía otra fecha para que se jugara la Noche Caturra por el apretado calendario de Colo-Colo, pero que están viendo otras opciones entre las que destaca trasladarse a Quillota.
Los dardos de Sánchez
El dirigente del cuadro Caturro también tuvo espacio para repasar a la Delegación, al comentar que “veníamos preparando el partido desde el 20 de diciembre. Recién el 2 de enero las autoridades asumieron su lugar y el viernes 3 recién tuvimos una reunión” manifestó.
Además, planteó las dudas que tiene acerca de la suspensión del encuentro, ya que cree que la decisión se tomó en Santiago, y que las razones para la no realización del amistoso no eran suficientes ya que los reparos se podían solucionar rápidamente.
Este podía ser el único partido que Santiago Wanderers jugara en Valparaíso este año, debido a las refacciones que tendrá el estadio Elías Figueroa Brander de cara al mundial sub-20 a realizarse entre septiembre y octubre en nuestro país.
