El presente del Chelsea ya parece crítico. El cuadro londinense no lo pasa para nada de bien en cuanto a lo económico, ya que fue uno de los principales perjudicados luego de la sanción del Gobierno británico contra Roman Abramovic, propietario aún del equipo inglés, donde le congelaron todos sus bienes, debido a su estrecha relación con Vladimir Putin.
Por lo anterior, el cuadro de Thomas Tuchel ha tenido que frenar las ventas de entradas a sus hinchas, al igual que todas las ventas de la tienda del club. Además, en cuanto al plantel, estos sufrieron con un considerable recorte en el dinero destinado para los viajes. De hecho, este no puede superar las 24 mil libras, por lo que incluso los futbolistas han tenido que poner dinero de su bolsillo para costear los desplazamientos en los partidos de visitantes.
Aunque eso no es todo, ya que el problema parece agudizarse aún más, ya que durante este viernes, según dio a conocer Bild, el cuadro inglés no ha podido cancelar la última cuota que le quedaba por el traspaso de Kai Havertz desde el Bayer Leverkusen.
Recordemos que el futbolista alemán dejó el club de su país a cambio de 80 millones de euros más un bonus, de los cuales aún quedaba una cuota por pagar, la cual llegaba a los 26,7 millones de la moneda europea. Sin embargo, y después de la sanción que cayó sobre Abramovich, esta cuota no ha podido ser pagada y no se sabe hasta cuando quedará adeudada. Por lo mismo, en el club alemán comienzan a ponerse nerviosos por la situación.
Una panorama complicado para el cuadro londinense que al parecer solo se solucionará con la venta, la cual tenía como fecha límite para presentar ofertas este viernes. Así que solo falta que se levante la sanción contra Abramovich y que el ruso acepte una oferta para poder darle aire al equipo inglés.