Unión Española vive sus días más oscuros. Atrapado en la zona de descenso y sin respuestas futbolísticas ni anímicas, el histórico club de colonia atraviesa una crisis profunda que tiene a su técnico, José Luis “Coto” Sierra, en el centro del huracán. La dura derrota 0-3 ante Everton en Santa Laura fue la cuarta consecutiva en el Torneo Nacional y dejó al equipo penúltimo, con apenas 6 puntos en 10 fechas.
El presente es sombrío también a nivel internacional. En la Copa Sudamericana, Unión está eliminada, sin triunfos y última en su grupo con solo 2 unidades, a falta de una jornada. Siete partidos sin ganar, entre torneo local y certamen continental, reflejan un equipo sin rumbo.
“Hoy debo ser el peor técnico de la historia”
La tensión explotó en conferencia de prensa. Consultado por su continuidad, el “Coto” Sierra no escondió su molestia: “Seguramente hoy, para los hinchas, debo ser el peor técnico de la historia de Unión Española”, dijo con un tono entre resignado e irónico. Se negó a hablar de una posible renuncia, pero fue enfático: “Cualquier decisión que tome será pensando en lo mejor para el club”.
A pesar del vendaval de críticas, desde la dirigencia no parecen haber señales de cambio inmediato. Sabino Aguad, gerente deportivo del club, lo respaldó públicamente: “No veo que se salga de esta situación por traer a otro entrenador. Hay siete jugadores lesionados. Esto hay que sacarlo adelante con lo que hay”, afirmó en conversación con Rumbo Deportivo.
Uno de los que no se guardó nada fue el defensor Nicolás Díaz, quien hizo un crudo diagnóstico: “Estamos peleando el descenso y es una realidad que debemos asumir. Ya no sirve jugar bonito ni dar 20 pases. Tocamos fondo. Ahora son solo finales”.
El jugador fue más allá: “Tenemos que despertar, no está funcionando lo que hacemos. Hay que ser más cabrones, poner el pecho a las balas”, dijo sin filtros.
El próximo examen de Unión será un duelo cargado de urgencia: este sábado visitan a Colo Colo en el Monumental, en un enfrentamiento entre dos equipos que no viven su mejor momento. Para los rojos, será una final más. Otra más en una temporada que, por ahora, solo suma frustraciones.
