Nada fácil fue lo que se gestó en el último capítulo de “El Discípulo del Chef“, luego de que iniciara su recta final con los mejores 10 participantes del espacio.
Así, en este episodio, los concursantes debieron preparar un menú chileno refinado, donde los ganadores de la primera temporada fueron Karen Bejarano, Valentina Ramos y Carolina Erazo.
El resto de los participantes se enfrentaron a una prueba de eliminación, la cual tuvo como ingrediente principal el zapallo.
Una vez que terminaron las preparaciones, llegó el tiempo de eliminación, donde Sergi Arola reveló quién dejaría el programa.
“No hay ningún plato que no se pueda comer, está todo rico, bien hecho y bien ejecutado. Hay decisiones y errores que cuestan caro, eso nos lleva a estas instancias”, inició comentando el chef español, que luego liberó el nombre de Max Cabezón.
“Sé que cometí varios errores”
Con emoción, el participante se refirió a este hecho, señalando que estaba feliz de haber llegado hasta esa etapa, “no me siento triste porque sé que cometí varios errores, pero a mi estilo“.
“Sí, me da un poco de tristeza dejarlos hoy, pero el mayor premio, más allá del restorán, me lo gané yo contigo, Miel“, expresó, para luego abrazar a su pareja.
Por último expresó: “Entiendo la decisión, me hubiera gustado quizás haber tomado determinaciones que me hubieran favorecido en el camino, pero son las reglas del juego“.
Por otro lado, Miel Blanca reaccionó a su salida, y expresó: “En realidad, todo ha sido muy extraño, porque en un momento partió como si fuera el destino, entonces, lo encuentro muy loco, y me da mucha pena que te vayas“.