El hecho ocurrió en Maine, Long Sands Beach.
Los termómetros llegaron hasta los 22° bajo cero, motivo por el que nadie saldría de sus casas, ya que sería mucho mejor quedarse acostado viendo alguna película o simplemente durmiendo. Pero nunca faltan los curiosos que buscan aventuras extremas.
Los fanáticos del patinaje sobre hielo, de la localidad de Maine, Long Sands Beach, no aguantaron sus ganas y decidieron salir. Así lo hicieron Peter y Sandra Lekousi, que descubrieron que el mar estaba congelado y que además era un lugar perfecto para patinar, así lo aseguró el Boston Globe.
Todo esto ocurrió en el marco del ciclón bomba que afecta a Estados Unidos, donde se han registrados -40° en las calles.
