El Gobierno de Nicaragua autorizó la liberación de más de 200 presos políticos y su salida este jueves de madrugada en un avión rumbo a Estados Unidos.
En total, serían 213 los presos excarcelados, por lo que el Gobierno los trasladó a todos ellos el miércoles por la noche a la cárcel de El Chipote, desde donde fueron evacuados ya de madrugada al aeropuerto.
Las autoridades no aclararon las identidades de los presos beneficiados por estas liberaciones, confirmadas también por la activista Berta Valle, esposa del político Félix Madariaga.
La directora de la ONG Amnistía Internacional para las Américas, Erika Guevara Rosas, celebró estas liberaciones, aunque se trate de personas que “han sido enviadas al exilio”. “Fueron presas por defender los Derechos Humanos y levantar la voz contra un régimen despiadado”, subrayó en Twitter.
La respuesta de Estados Unidos tras el dictamen del Gobierno de Nicaragua
Antony Blinken, secretario de Estado de EE. UU., confirmó la llegada de los opositores y se refirió a esto en un comunicado: “La liberación de estos individuos (…) marca un paso constructivo para abordar los abusos contra los derechos humanos en el país y abre la puerta a un mayor diálogo entre Estados Unidos y Nicaragua sobre temas de interés”.
Asimismo, el Departamento de Estado de EE. UU. señaló que esta decisión fue “unilateral”. En ese sentido, explicó que facilitaron “el transporte de estas personas una vez liberadas en Nicaragua y recibirán un permiso para permanecer en el país por dos años por razones humanitarias”.