Las víctimas de abusos cometidos por el exsacerdote Fernando Karadima, Juan Carlos Cruz y José Andrés Murillo, asistieron este jueves a declarar a la Fiscalía de Rancagua por el caso que investiga presuntos encubrimientos por parte de los cardenales Francisco Javier Errázuriz y Ricardo Ezzati.
Tras la cita, Cruz comentó que le “impresionó la cantidad de información que maneja la Fiscalía y la cantidad de acciones que van a ir tomando”.
Agregó que “estos hombres se merecen las penas del infierno” y que “por lo que vimos no me extrañaría que algunos que piensan que son inocentes palomas, por la cantidad de pruebas que tiene la Fiscalía, no me extrañaría que alguno termine en la cárcel”.
Mientras Juan Carlos Cruz hablaba con la prensa antes de entrar a la reunión con los fiscales, fue increpado por una mujer que le dijo que limpiara la boca antes de tratar a Ezzati de delincuente.