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El ministro del Interior y Seguridad Pública, Rodrigo Delgado, este viernes llegó hasta el Aeropuerto Internacional de Santiago para participar de la inspección del primer cargamento de armas a fogueo que será retenido tras la publicación de la resolución que prohíbe su comercialización.

El Jefe de Gabinete fue acompañado por el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, la subsecretaria de Prevención del Delito, María José Gómez, el General Director de Carabineros, Ricardo Yáñez, y el Director General de la Policía de Investigaciones, Sergio Muñoz.

En la instancia, el secretario de Estado explicó que durante su gestión se ha combatido el uso de armas con la Ley de Control de Armas, con esta resolución, pero también con un trabajo policial enfocado en la tríada.

En cuatro años se han requisado 15.400 armas de fuego, se han incautado 175 toneladas de droga y se ha desbaratado a 6.120 bandas criminales“, detalló el titular del Interior.

“Además, 1.133 armas modificadas han sido confiscadas“, complementó.

Cabe recordar que, el 25 de enero de 2022 se promulgó la resolución que prohíbe la venta de armas de fogueo, específicamente las que son más susceptibles para su transformación, ya sea por la similitud que tienen con modelos de armas convencionales, el calibre de sus municiones, sus mecanismos de funcionamiento, etcétera. Es por esta resolución que estas 900 armas de fogueo que se incautaron, quedarán retenidas y no podrán ser comercializadas.

La resolución prohíbe la comercialización de las armas de fogueo cuyas diez marcas se detallan a continuación: Bruni (BBM), Ekol, Zoraki, Blow, Leo, Kusey, Carrera, Ceonic, ISSC, y Kimar.

El titular de Interior explicó que las armas son modificadas una vez que ingresan a territorio nacional y quedan con poder de fuego letal.

“Si ven la forma, los detalles, el peso, la configuración de las armas, inmediatamente uno se pregunta, ¿para qué ingresan a Chile estas armas a fogueo, de fantasía? Si claramente no van a ser regalo de Navidad o de cumpleaños para un niño. Si claramente hay un fin, ya sea modificarlas para cometer un ilícito, para herir o matar a alguien, como ha ocurrido, o para intimidar a alguien, aunque no haya sido modificada“, afirmó.

Agencia Uno.

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