La tensión en Medio Oriente sigue en ascenso. Este lunes, el presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, reafirmó que su país continuará respondiendo a los ataques iniciados por Israel y que se intensificaron el fin de semana con la intervención militar de Estados Unidos.
A través de su cuenta en la red social X, Pezeshkian declaró: “No iniciamos la guerra ni la quisimos, pero no dejaremos sin respuesta la agresión contra el Gran Irán”, en clara alusión a los recientes bombardeos contra instalaciones nucleares clave como Isfahán, Fordow y Natanz.
El mandatario agregó que su gobierno defenderá “la seguridad de esta querida nación con todo nuestro ser”, comprometiéndose a responder a cada ataque con “fe, sabiduría y determinación. Dios vela por nosotros”.
Minutos después de su publicación, Irán ejecutó una ofensiva con misiles dirigida a bases militares estadounidenses en Catar e Irak, como represalia por los ataques previos de Washington.
Frente a este hecho, el Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán explicó que el ataque en Catar no representa una amenaza directa para el país árabe ni su población.
“La República Islámica sigue comprometida a mantener sus relaciones históricas con Catar”, aseguraron desde Teherán.
La situación sigue en desarrollo, en un contexto de creciente inestabilidad geopolítica que involucra a varios actores internacionales.
Cabe destacar que desde el Pentágono, se confirmó que no se registraron bajas estadounidenses tras los ataques perpetrados desde Irán.
