
A casi un año del trágico accidente aéreo en el que falleció el ex Presidente Sebastián Piñera, la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) entregó un informe detallado sobre lo ocurrido en Lago Ranco el 6 de febrero de 2024. El documento confirma que el ex Mandatario contaba con las condiciones necesarias para pilotear y que la aeronave cumplía con todas las normativas exigidas.
El informe descarta que Piñera presentara consumo de alcohol o sustancias, ya que su examen toxicológico arrojó 0. Asimismo, se detalla que tenía 74 años, que su licencia era de piloto privado, su examen médico estaba vigente y que era apto para volar, aunque con la condición de usar lentes. Su experiencia como piloto sumaba 569,18 horas de vuelo, y un día antes del accidente había realizado un trayecto de 24 minutos.
Sobre la aeronave, se confirmó que su mantenimiento estaba al día según las normas vigentes y que cumplía con los requisitos operacionales establecidos en la normativa DAN 92 Volumen III. Además, el helicóptero contaba con equipos de comunicación en regla, permitiendo el intercambio de mensajes radiales. También se verificó que la aeronave no tenía sobrepeso y estaba dentro de los parámetros de vuelo permitidos.
El informe de la DGAC también incluye relatos de testigos que presenciaron el último despegue de Piñera. Se indica que el ex Presidente y sus tres acompañantes abordaron el helicóptero tras salir de una vivienda en Coique, en medio de una llovizna que los dejó con ropa húmeda. Un testigo relató que Piñera intentó encender el motor, pero falló en su primer intento, por lo que esperó cinco minutos antes de intentarlo nuevamente con éxito.
Luego del despegue, la aeronave realizó un vuelo estacionario alto, giró 180° y se desplazó con rumbo norte. Sin embargo, tras avanzar unos metros, viró hacia la izquierda y descendió hasta impactar en el lago, a 172 metros del punto de partida. Los tres pasajeros lograron salir del helicóptero, mientras que Piñera se hundió con la aeronave, falleciendo por asfixia por inmersión. El helicóptero quedó a 28 metros de profundidad, con severos daños estructurales.